¡Nuevo éxito! Esta vez, la contingencia ha sido profesional (accidente de trabajo). Se declara una Incapacidad Permanente total a un trabajador que sufrió un accidente laboral y le quedaron secuelas derivadas del mismo.
El problema
Nuestro cliente era encofrador, profesión plenamente física. El cliente sufrió un accidente laboral mientras prestaba sus servicios a favor de la empresa. Debido a ello su brazo derecho quedó plenamente afectado con gran limitación funcional y dolor, que le impiden realizar las tareas tan físicas que se realizan en un trabajo como el suyo.
El dictamen médico del ICAM reflejaba dichas patologías, pero señalaban que la limitación era leve, algo totalmente irreal.
Ante esta situación presentamos reclamación previa ante el INSS que denegó nuevamente, tras lo que presentamos demanda judicial.
Reconocimiento de invalidez total por accidente laboral.
La demanda se repartió en el Juzgado de lo Social nº 11 de Barcelona que tras la celebración del juicio se dictó Sentencia estimando nuestra demanda en todas sus peticiones. El Magistrado entendió que el cuadro patológico de nuestro cliente era lo suficientemente invalidante como para no poder desarrollar su profesión habitual con un mínimo de exigencia profesional y de garantías.
El razonamiento y la decisión definitiva del magistrado se basó en el estudio biomecánico aportado por nuestro abogado donde se señalaba lo siguiente:
“Las alteraciones funcionales objetivadas, en relación con la patología de la extremidad superior izquierda y los antecedentes de fractura de la muñeca derecha, condicionan/limitan tareas que requieran movimientos repetitivos de las extremidades superiores, así como la manipulación de herramientas o pesos, suponiendo un riesgo añadido al inherente de la propia actividad profesional”.
Adjuntamos la sentencia para que puedas echarle un vistazo: