Consejos para afrontar el tribunal médico (y pasarlo)

¿Qué es el Tribunal Médico?

Se trata de un organismo del Instituto Nacional de la Seguridad Social, encargado de evaluar las solicitudes de incapacidades laborales, así como también las revisiones que correspondan. Este tribunal evalúa desde una incapacidad temporal- para determinar si el trabajador se puede reincorporar a su trabajo tras ese proceso, o si se debe dictaminar si la baja es derivada de accidente de trabajo o no- hasta casos donde se estudia si una persona cumple los requisitos para obtener la Incapacidad Permanente. Esto último lo hacen valorando la situación del trabajador, y redactando unos informes que posteriormente servirán a la Seguridad Social para reconocer o no la posible incapacidad. 

¿De quién depende el Tribunal Médico?

En algunas comunidades autónomas este órgano depende directamente del INSS, estando integrado dentro del EVI o Equipo de Valoración de Incapacidades. Mientras tanto, en otras como en Cataluña, depende de otra administración. En ese caso de la Generalitat, donde el tribunal médico era conocido hasta hace poco como Institut Català d'Avaluacions Mèdiques (ICAM), y que ahora toma el nombre de Subdirecció General d'Avaluacions Mèdiques (SGAM). Este es el órgano a quien corresponde llevar a cabo las valoraciones en dicha comunidad.

El momento de la visita

Una vez dentro de la consulta es importante contar con el máximo de informes médicos sobre la incapacidad a valorar. Ya sea tanto de una enfermedad como de una lesión. En ese momento, el médico del tribunal te hará una serie de preguntas. Para que puedas prepararlas previamente, estas pueden ser desde cómo te encuentras hasta si has ido solo o acompañado. O si has mejorado o no, entre otras de esta índole.

Después se te realizará una exploración física en esa misma visita, en especial si es por una dolencia física. Atiende las peticiones que te formulen al respecto. Por ejemplo, en casos de lumbalgia, puede que te pida que te agaches, caminar de puntas y talones, tumbarte en la camilla y que levantes la pierna, etc. La finalidad de este modo de proceder es conseguir el máximo de información de cada caso en concreto, más allá de lo que digan los informes médicos que aportéis. 

Por lo tanto, el tribunal médico no solo revisa las solicitudes y evalúa al solicitante y su capacidad de mejora para determinar, además, si proceden revisiones en el futuro. Sino que también analiza toda la documentación e informes de los médicos que han tratado al solicitante para su dictamen.

Preguntas "trampa" del Tribunal Médico

Antes de nada, en primer lugar vamos a exponer aquí algunas preguntas que puede formularte el Equipo de Valoración de Incapacidades (EVI, o SGAM en Cataluña) que pueden llegar a ser consideradas como "trampa". Interrogantes que se plantean para obtener una respuesta que puede provocar que se tome una decisión poco favorable para ti, sin que lo percibas a priori, sea o no esa la intención. Sobre todo se tratará de cuestiones relacionadas con las actividades que realizas en tu vida cotidiana y con el nivel de afectación de la enfermedad o lesión que puede ser causa de la incapacidad. Incluso pueden solicitarte que ejecutes algunos movimientos, y es esencial que no te niegues a ello.

En este mismo artículo, más abajo, encontrarás los principales consejos a seguir, pero en general lo importante es que seas sincero sin engrandecer tus dolencias ni tampoco quitarles importancia. No te muestres a la defensiva, ni por supuesto mientas. Si respondes a todo bajo dichas premisas, no te verás en ningún momento en un laberinto sin salida. Recuerda que la finalidad es evaluar cómo son en realidad tus limitaciones físicas o psíquicas, no hacerte sentir incómodo.  A continuación tienes 10 ejemplos de "preguntas trampa "del tribunal médico:

• ¿Has venido solo a esta valoración?
• ¿Notas que has mejorado últimamente?
• ¿Qué puesto ocupas y cuáles son las tareas fundamentales de tu profesión?
• Explica las dificultades que tienes en el desempeño de tu trabajo habitual
• ¿Estás de acuerdo con lo que la mutua o tu especialista afirma sobre tus dolencias?
• ¿Qué actividades llevas a cabo en tu día a día?
• ¿Cómo te afectan tus síntomas o secuelas?
• ¿Por qué etapas ha pasado tu patología o lesión?
• ¿Cómo te sientes a día de hoy?
• ¿Por qué crees que necesitas una incapacidad permanente?

Consejos para pasar el tribunal médico

Sabemos que es un momento de mucha tensión, porque te juegas mucho en esa visita, de modo que nuestra recomendación es que, en la medida de lo posible, trates de estar lo más tranquil@ que puedas. Junto a ello, lo esencial a la hora de afrontar la evaluación del tribunal médico es ser coherente con las enfermedades o dolencias que se padecen. Siendo fiel a la realidad y a los informes médicos sin exagerar ni ocultar la gravedad de las limitaciones. Dicho en otras palabras, no hacer “cuento”, aunque tampoco quitar importancia al dolor y sus inconvenientes. Y siempre con un lenguaje claro y ágil, sin sobreactuar ni presentando una actitud negativa hacia tus examinadores.

La clave está en ser natural y coherente. 

Por ejemplo, si los informes especifican que debes ir con bastón pues sería necesario que acudieras con bastón. En contrapartida, si no es así (y a no ser que sea imprescindible) mejor no llevarlo porque al valorador médico le puede parecer que estás “inflando” las secuelas de tu patología o accidente.

Conclusión

Estos consejos serían aplicables no solo a la primera vez que se tiene que afrontar este trámite, sino también en los casos de revisión de grado de Incapacidad, cuando al trabajador le vuelven a citar con este tribunal. En resumen, lo idóneo es llevar todos los informes médicos que tengas y apoyen tu caso. Y una vez allí permanecer tranquilo y ser, sobre todo, sincero.