Forzar despido por acoso laboral por parte de los empresarios
En el ámbito profesional, el acoso se ha convertido en una preocupante realidad, antes menos "visible" y que ahora cada vez se denuncia más.
Hemos redactado este artículo con un formato de guía informativa práctica. Queremos proporcionarte una visión detallada sobre cómo abordar situaciones de acoso laboral, aunque enfocándonos en el proceso de acosar laboralmente al trabajador para forzar su renuncia y las posibles consecuencias que puede tener.
Es importante entender que el acoso laboral no solo puede afectar a tu bienestar emocional y físico, sino que también puede tener serias implicaciones legales para todas las partes implicadas.

Índice de contenidos
Forzar un despido por acoso laboral
El acoso laboral, conocido también como “mobbing”, se refiere a cualquier forma de abuso psicológico, intimidación o discriminación en el entorno laboral.
Forzar un despido por acoso laboral implica crear un ambiente de trabajo hostil para el trabajador, con el fin de que este decida terminar su relación laboral de forma voluntaria.
Naturalmente esto implica que el trabajador se vaya sin cobrar indemnización alguna, y en muchos casos, con la carga psicológica añadida de haberse quedado sin su principal fuente de ingresos.
Estrategias comunes de acoso laboral
- Asignación de tareas imposibles o subestimando las capacidades: sobrecargar al empleado con tareas irrealizables, o asignarle funciones que están muy por debajo de sus capacidades, con el objetivo de minar su autoestima y eficacia.
- Aislamiento y exclusión: ignorar o excluir al empleado de reuniones, correos electrónicos importantes o actividades del equipo, con el fin de que se sienta marginado.
- Descrédito y difamación: difundir rumores falsos o criticar constantemente el trabajo del empleado, también en público, menoscabando su reputación profesional y personal.
Consecuencias legales del acoso laboral
En España, el acoso laboral es considerado una violación grave de los derechos del trabajador. Es decir, la legislación laboral española, en particular el Estatuto de los Trabajadores y la Ley de Prevención de Riesgos Laborales, protege a los empleados de ser sometidos a cualquier forma de acoso o discriminación en el trabajo. Las consecuencias para la empresa pueden incluir:
- Demandas por despido: si un empleado se ve obligado a renunciar a su trabajo debido al acoso laboral al que está siendo sometido, puede demandar a la empresa solicitando la extinción laboral del contrato por incumplimiento empresarial.
- Sanciones económicas: la inspección laboral podría imponer multas significativas a la empresa por no prevenir o abordar adecuadamente el acoso laboral.
- Daño reputacional: las acusaciones de acoso laboral pueden dañar seriamente la imagen pública de la empresa, afectando su relación con clientes, socios y potenciales empleados.
Ejemplo de acoso laboral
Imagina a un empleado, Carlos, quien es sistemáticamente excluido de reuniones importantes y se le asignan tareas con plazos imposibles.
A pesar de sus quejas, la dirección ignora la situación. Carlos lo denuncia ante la Inspección de Trabajo y Seguridad Social. Después decide renunciar porque no aguanta más, aunque posteriormente demanda a la empresa por acoso laboral y despido, solicitando que este se declare improcedente porque si se declarase nulo podría tener que volver a la empresa.
La empresa se enfrenta ahora a un juicio laboral, con la posibilidad de tener que compensar a Carlos económicamente y asumir una sanción administrativa importante por no haber prevenido el acoso.
¿Sufres acoso laboral?
Identificar el acoso laboral puede ser complicado, ya que no siempre es evidente y puede manifestarse de diversas maneras.
Si te sientes víctima de acoso en tu lugar de trabajo, considera tomar medidas y ten en cuenta los siguientes pasos para abordar la situación:
- Documentación: mantén un registro detallado de los incidentes de acoso, incluyendo fechas, horas, lugares y testigos potenciales. Esta documentación será crucial en caso de una disputa legal.
- Comunícalo: habla con tu superior o con el departamento de recursos humanos sobre tu situación; es posible que la cúpula de la empresa no sea consciente del acoso y pueda tomar medidas para resolverlo.
- Consulta a un experto: busca el asesoramiento legal de un abogado especializado en Derecho Laboral, que te proporcionará una comprensión clara de tus derechos y opciones.
- Denuncia ante las autoridades: ai la situación no mejora, puedes presentar una denuncia ante la Inspección de Trabajo y Seguridad Social, o acudir a la vía judicial para solucionar el problema.
Ejemplo de cómo actuar ante acoso laboral
Ana, una empleada que ha sido objeto de comentarios despectivos por parte de su jefe, decide documentar cada incidente y conversación en la que ha sido humillada.
Después de reunir suficientes evidencias, se dirige al departamento de recursos humanos para presentar una queja formal.
Al no recibir una respuesta adecuada y viendo que el acoso continúa, Ana decide consultar a un abogado especializado en Derecho Laboral, quien le asesora sobre cómo proceder legalmente contra la empresa por no actuar contra el acoso.
¿Te han acusado de forzar un despido mediante acoso laboral?
Si eres un gerente, supervisor o compañero de trabajo y te enfrentas a acusaciones de participar o fomentar un ambiente de acoso laboral, es crucial abordar la situación con seriedad y profesionalidad. Aquí tienes algunos pasos a seguir:
- Evalúa la situación: reflexiona sobre tus acciones y comportamientos para entender si quizá pueden haber sido interpretados como acoso. A menudo, la comunicación inadecuada o los malentendidos pueden llevar a percepciones equivocadas.
- Busca asesoramiento legal: ante una acusación formal, es vital consultar a un abogado especializado en Derecho Laboral que pueda orientarte sobre los pasos a seguir.
- Coopera con la investigación: si tu empresa inicia una investigación interna sobre las acusaciones, es importante que cooperes plenamente y proporciones tu versión de los hechos de manera clara y objetiva.
- Toma medidas correctivas: si se determina que tus acciones constituyeron acoso, es importante que te responsabilices y participes en cualquier medida correctiva que la empresa considere necesaria, como formaciones sobre el entorno de trabajo o mediación.
Ejemplo de acusación de forzar despido por acoso laboral
Luis, un supervisor, es acusado de acoso laboral por varios de sus subordinados, quienes alegan que constantemente los somete a presiones indebidas y comentarios despectivos.
Luis participa en la investigación interna, evidenciando la alta carga de trabajo y los plazos ajustados que justifican su exigente enfoque con los empleados.
Sin embargo, reconoce que su estilo de comunicación podría haber sido percibido como hostil.
Luis se compromete a asistir a talleres de comunicación y liderazgo para mejorar su interacción con el equipo.
Las consecuencias de forzar un despido por acoso laboral
Forzar un despido por acoso laboral es una situación grave con significativas repercusiones legales y éticas en España.
Tanto trabajadores como empresarios deben ser conscientes de sus derechos y responsabilidades en el entorno laboral.
Las víctimas de acoso deben documentar los incidentes y buscar asesoramiento legal, mientras que aquellos acusados de acoso deben reflexionar sobre sus comportamientos y cooperar con las investigaciones pertinentes.
En última instancia, un entorno de trabajo respetuoso y libre de acoso beneficia a todos, aumentando la motivación, fomentando la productividad, el bienestar y la satisfacción laboral.