Valorar mi caso gratis

Despido procedente: te lo contamos todo

El despido procedente no es más que un despido justificado.

Ser despedido normalmente afecta psicológicamente, pero si has sido despedido de forma procedente, es que la empresa tenía derecho a despedirte por una causa más que justificada. 

A partir de estas líneas te explicaremos qué implica un despido procedente, cómo se diferencia de un despido improcedente, los requisitos necesarios para que sea declarado “procedente”, la indemnización correspondiente, cómo calcular el finiquito, si es posible provocar un despido procedente, y los aspectos relacionados con el preaviso y las causas para llevar a cabo un despido procedente.

Así que, sigue leyendo porque son muchos conceptos los que debes tener en cuenta.

Despido procedente: te lo contamos todo

Índice de contenidos

  1. ¿Qué es el despido procedente?
  2. Diferencias entre despido procedente e improcedente
  3. Requisitos para un despido procedente
  4. Indemnización por despido procedente
  5. ¿Se puede provocar un despido procedente?
  6. Preaviso y causas del despido procedente

¿Qué es el despido procedente?

El despido procedente es una terminación del contrato de trabajo que se realiza de acuerdo con la legislación laboral y los términos del contrato.

Dicho con palabras más comprensibles, la empresa tiene una razón justificada para poner fin al contrato, y lo hace siguiendo el proceso legal establecido.

Diferencias entre despido procedente e improcedente

La principal diferencia entre un despido procedente e improcedente radica en la justificación del despido.

  • En un despido procedente, la empresa tiene una causa válida y legal para poner fin al contrato. Por ejemplo, un incumplimiento grave por parte del trabajador.
  • Por otro lado, en un despido improcedente, no existe una causa justificada o no se han seguido los trámites adecuados, lo que lo convierte en contrario a la legislación vigente.

Qué requisitos se han de cumplir para que sea un despido procedente

Para que un despido sea considerado procedente, deben cumplirse los siguientes requisitos:

  • Causa justificada: La empresa debe tener una razón justificada para despedir al empleado, y debe incluirla así en la carta de despido porque luego no podrá alegar otra causa.
    Esto puede incluir el incumplimiento grave de las obligaciones laborales, faltas repetidas o un motivo económico justificado.
  • Cumplimiento del procedimiento legal establecido por ley: El despido debe llevarse a cabo siguiendo los procedimientos legales establecidos.
    Esto incluye el preaviso de 15 días (en caso de despido por causas objetivas) y la notificación por escrito de la carta de despido.
  • Cumplimiento del contrato: La empresa debe asegurarse de que el despido cumple con los términos del contrato laboral.
    Por ejemplo, si el contrato especifica un período de preaviso, este debe respetarse, aunque el despido sea disciplinario.

¿La indemnización por despido procedente existe?

No, en principio, pero hay excepciones. El despido procedente por causas disciplinarías no conlleva el pago de ninguna indemnización.

Eso sí, si te despiden por causas disciplinarias lo que sí o sí te tienen que abonar es el denominado “finiquito”.

Si el despido procedente se produce por causas objetivas sí conlleva el pago de una indemnización de 20 días por año trabajado hasta un máximo de 12 mensualidades.

Cómo calcular el finiquito por despido procedente

Para realizar el cálculo del finiquito, que no es otra cosa que la parte del salario que a la empresa le falta por pagar al trabajador, los componentes a tener en cuenta y que hay que sumar para calcularlo son:

  • El sueldo correspondiente a los días laborados desde el último pago de nómina.
  • La proporción de las pagas extraordinarias acumuladas pero no abonadas, en caso de no haber sido distribuidas a lo largo del año.
  • Las vacaciones acumuladas que no se hayan disfrutado.
  • Las horas extraordinarias que no se hayan pagado y estén pendientes.
  • Adicionalmente, pueden existir otras cantidades acordadas en el contrato laboral, por convenio colectivo o a través de un acuerdo empresarial, como bonificaciones, premios especiales, cumplimiento de metas, entre otros.

Si quieres conocer al detalle este cálculo haz clic aquí.

Cómo calcular la indemnización por despido procedente por causas objetivas

El cálculo de la indemnización por despido procedente se basa en el tiempo que el trabajador ha estado en la empresa.

A continuación, se muestra un ejemplo práctico para calcular la indemnización:

Supongamos que un trabajador ha estado en la empresa durante 5 años y su salario mensual es de 2.000 €, es decir, cobra en 14 pagas 28.000 €. En este caso, la indemnización se calcula de la siguiente forma:

  • 28.000 €/365 días x 60 meses de antigüedad x (20 días/año/12 meses) = 7.671 €.

En este ejemplo, el trabajador tendría derecho a una indemnización de 7.671 € por su despido procedente.

¿Se puede provocar un despido procedente? ¿Cómo?

No es recomendable provocar un despido procedente de manera intencionada, ya que esto puede tener consecuencias legales negativas para ti como trabajador.

Además de que empresas futuras que vayan a contratarte, pueden pedirte tu vida laboral y acabar conociendo por qué dejaste de trabajar en alguna de las empresas. Dicho de otro modo, futuras empresas podrían contactar con esa empresa y conocer la causa del despido.

Sin embargo, lo que sí puedes hacer es tomar medidas legales a la hora de proteger tus derechos y evitar que la empresa te despida de forma procedente cuando realmente el despido se ha producido de forma injustificada.

Preaviso y causas del despido procedente

En España, el preaviso es un aspecto importante en el despido procedente. Sobre todo porque depende del tipo de despido procedente que vaya a producirse.

La empresa debe notificar al trabajador con 15 días de anticipación sobre su intención de poner fin al contrato en el caso de que el despido sea por causas objetivas.

Pero en el caso de un despido disciplinario, la empresa no tiene por qué avisar al trabajador.

Es lógico, dado que entre otras muchas causas que pueden llevar a un despido procedente se incluyan el incumplimiento grave de las obligaciones laborales, el acoso en el lugar de trabajo, o incluso otro tipo de delitos como el robo, hurto o el mal uso de los datos personales de clientes o información confidencial de procesos de producción.

En conclusión, el despido procedente es un proceso regulado de forma legal, que permite a las empresas y demás empleadores poner fin a los contratos laborales de manera justificada.

Los trabajadores tienen derecho a recibir el finiquito, y en el caso de que el despido sea por causas objetivas, una indemnización basada en su antigüedad en la empresa, el salario percibido y los días legales establecidos por ley, en la actualidad 20 días por año trabajado hasta un máximo de 12 mensualidades.

Sin embargo, es importante cumplir con los requisitos legales y seguir los procedimientos adecuados para asegurarse, en caso de reclamación o demanda del trabajador, que el despido sea considerado procedente.

Siempre surgen muchas dudas en este tipo de despidos, así que es muy recomendable un buen asesoramiento legal para proteger tus derechos, ya seas empresa o trabajador.

Sentencias relacionadas

Preguntas frecuentes

  • Despido procedente: La empresa tiene una causa legal para despedirte y sigue el proceso legal.

  • Despido improcedente: No hay causa legal o no se ha seguido el proceso legal.

  • Causa justificada: Incumplimiento grave de obligaciones, faltas repetidas, motivos económicos.

  • Cumplimiento del procedimiento legal: Preaviso de 15 días (causas objetivas), carta de despido.

  • Cumplimiento del contrato: Respetar el período de preaviso del contrato.

  • Despido disciplinario: No hay indemnización, solo finiquito.

  • Despido por causas objetivas: Indemnización de 20 días por año trabajado (máximo 12 mensualidades).

  • Salario de los días laborados desde el último pago.

  • Proporción de pagas extraordinarias no abonadas.

  • Vacaciones acumuladas no disfrutadas.

  • Horas extraordinarias pendientes.

  • Otras cantidades acordadas en el contrato o convenio.

calculo-despido-finiquito-paro

¿Quieres calcular tu despido, finiquito y paro?

Averigua gratis y en 2 minutos tu indemnización, el finiquito que te correspondería y cuánto cobrarías de paro.

Calcular gratis
New call-to-action