¿Qué es el despido disciplinario?
El despido disciplinario es la manifestación más severa del poder sancionador de una empresa, ya que el despido disciplinario tiene consecuencias perjudiciales en el futuro inmediato del trabajador . Precisamente por ello, las causas de despido disciplinario deben estar debidamente respaldadas y documentadas en la carta de despido.
Pero, ¿qué es el despido disciplinario exactamente? Este tipo de despido puede producirse si se acusa a un empleado de haber cometido una falta grave en el trabajo, de manera culpable. Y es importante destacar que es muy distinto del despido objetivo, el cual está relacionado con cambios en la empresa o con la ineptitud del trabajador para realizar sus tareas, pero sin mala fe ni culpa grave.
En la carta de despido, se pueden mencionar varias causas del despido disciplinario, que en conjunto fundamenten la decisión del empresario. Sin embargo, la simple presencia de una de ellas es suficiente para que se pueda llevar a cabo esta clase de despido.
Causas del despido disciplinario
El Estatuto de los Trabajadores recoge un listado de los incumplimientos del trabajador que llevarían a un cese disciplinario. Pero siempre, sean cuales sean los que finalmente se imputen, recordemos que han de ser faltas graves en el trabajo (y culpables, es decir, por voluntad del empleado).
En resumen, en un despido disciplinario los motivos pueden ser:
- Faltas de asistencia o puntualidad injustificadas
- Indisciplina o desobediencia en el trabajo
- Ofensas verbales o físicas
- Transgresión de la buena fe contractual
- Disminución relevante, continuada y voluntaria del rendimiento
- Embriaguez o toxicomanía, si es habitual y repercute negativamente en el trabajo
- Acoso discriminatorio a otros miembros de la empresa, por su raza, religión, creencias, discapacidad, edad u orientación sexual. O acoso sexual.
No obstante, los trabajadores, en lugar de ser despedidos, también pueden ser sancionados por uno de estos hechos, de acuerdo con la graduación de faltas y sanciones que se establezcan en el convenio colectivo aplicable.
Despido disciplinario falso
Un despido disciplinario falso podría existir si la empresa miente en sus argumentos, es decir, si se trata de un despido disciplinario con falsas acusaciones. En consecuencia, el despido disciplinario sin causa, "falso" o fraudulento, se suele calificar como despido improcedente. En esos casos, el afectado cobraría una indemnización por despido disciplinario improcedente.
Despido disciplinario: motivos insuficientes
Pero también se podría catalogar de improcedente si las acusaciones, pese a ser ciertas, son graves pero no se observa culpabilidad.
Por ejemplo, en la jurisprudencia encontramos un despido disciplinario atribuido al comportamiento de un miembro del personal con ludopatía, quien había cometido una falta muy grave pero no era consciente del alcance de sus actos. Había gravedad pero faltaba el factor de la culpabilidad y, por tanto, no cabía dictar un despido disciplinario procedente. Por el contrario, el juez le concedió una indemnización por despido disciplinario improcedente.
El preaviso en el despido disciplinario
En un despido disciplinario, el empresario no tiene la obligación de avisar al trabajador con antelación. Tenlo en cuenta, ¡te pueden echar de inmediato! En el despido disciplinario, el preaviso de 15 días no existe, como sí sucede en los despidos objetivos.
Plazo límite de despido disciplinario
Si bien no hay preaviso en un despido disciplinario, el plazo para aplicar la sanción de despido por haber cometido una falta muy grave es de 60 días desde que la empresa tiene conocimiento de ella. Y, en cualquier caso, no se pueden superar los seis meses desde que sucedió el incumplimiento.
Despido disciplinario: tipos y ejemplos
Antes de entrar a exponer ejemplos de despido disciplinario, toma nota de que un despido disciplinario puede ser:
- Procedente, si es correcto porque se ha demostrado la causa alegada por el empresario y esta, además, se ajusta a la ley.
- Improcedente, cuando no tiene un motivo suficientemente justificado. Implica percibir una indemnización por despido improcedente.
- Nulo, si es discriminatorio o vulnera derechos fundamentales. Por ejemplo, el despido de una trabajadora solo por estar embarazada, alegándose un motivo disciplinario no existente.
Despido disciplinario: ejemplos de procedencia
Un juzgado de lo Social calificó de procedente el despido disciplinario de un transportista que se ausentó del trabajo -sin justificarlo- durante 15 días durante la pandemia del COVID.
Y si buscamos sentencias de altos tribunales, podemos destacar una de un Tribunal Superior de Justicia donde se declaró un despido disciplinario procedente después de que un carnicero se incorporase una semana después de la finalización de sus vacaciones por perder un vuelo, sin que demostrara que no había otras plazas disponibles o que su precio era muy elevado.
Despido disciplinario: ejemplos de improcedencia
El Tribunal Supremo confirmó la improcedencia del despido de un comercial que había sido impuntual durante varios días, pero retrasándose menos de media hora. Y se le reconoció, al ser improcedente su despido disciplinario, una indemnización.
También fue improcedente el despido, según un Tribunal Superior, de un electricista que faltó a su puesto por vacaciones fijadas de común acuerdo, sin que la empresa se las hubiera denegado.
Despido disciplinario y consecuencias
Según cual sea su calificación (procedente, improcedente o nulo) un despido disciplinario tiene consecuencias. La primera de ellas no es una buena noticia, porque no hay indemnización en un despido disciplinario, salvo que después se determine que es improcedente.
Lo que sí cobrarías tras un despido disciplinario es el finiquito, una liquidación de cantidades que ya has generado pero aún no has percibido y que es distinta a la indemnización: vacaciones pendientes, horas extra no percibidas, etc.
¿Existe derecho a paro?
¡Y hay otra consecuencia positiva! O, al menos, no negativa: el despido disciplinario tiene paro. O, más correctamente expresado, no impide cobrar el desempleo si has generado este derecho -gracias a haber cotizado lo suficiente- y te encuentras en situación legal de desempleo.
Indemnización despido disciplinario
Tras un despido disciplinario, como antes hemos señalado, no te abonarán ninguna indemnización. El despido disciplinario por haber cometido una falta grave en el trabajo no te hará ganar una cantidad extra. Pero recuerda que, en el despido disciplinario, el finiquito sí es obligatorio recibirlo. Incluso aunque reclames y se confirme que es un despido disciplinario procedente.
Indemnización por despido improcedente
Por el contrario, el despido disciplinario tendrá indemnización si acaba calificándose de improcedente, como también hemos mencionado en anteriores párrafos. La indemnización en ese supuesto tiene dos variantes:
-Para contratos firmados a partir del 12 de febrero de 2012, es de 33 días por año trabajado. Pero con un tope a percibir: 24 mensualidades.
- Y si el contrato es anterior a esa fecha, corresponderán 45 días por año trabajado hasta el 11 de febrero de 2012 (inclusive). En este segundo cómputo, el límite es mayor, y alcanza 42 mensualidades. Pero se utilizará la fórmula de 33 días por año trabajado durante el tiempo cotizado desde el 12 de febrero de 2012 en adelante, si lo ha habido.
Procedimiento de la empresa para iniciar un despido disciplinario
Siguiendo el procedimiento de despido que impone la ley, el despido disciplinario debe quedar reflejado en la carta de despido. Puede comunicarse verbalmente, lo que es muy común. Sin embargo, la normativa exige su formalización escrita a través de una carta que cumpla los requisitos que vamos a indicar a continuación.
La carta de despido disciplinario
En la carta de despido deben quedar plasmados los motivos del despido disciplinario (de forma precisa y clara, no mediante expresiones genéricas). Esto no significa que el empresario deba entrar en detalles minuciosos de los hechos supuestamente ocurridos, pero sí es imprescindible que exponga, en concreto, las faltas graves en el trabajo que han desembocado en el despido.
Pero el documento también ha de recoger los siguientes datos:
- Datos de la empresa y del trabajador
- La fecha en la que se comunica el cese
- La fecha en la que el despido cobra efectos
- Puesta a disposición del finiquito
¿Cómo se impugna un despido disciplinario?
Si quieres reclamar contra un despido de estas características, porque tu despido disciplinario se basa en falsas acusaciones, puedes hacerlo. No te conformes si no es cierta su afirmación ni hay pruebas de haber cometido una falta muy grave por tu parte. ¡Piensa que podrías llegar a conseguir una indemnización por despido disciplinario improcedente!
En primer lugar, firma la carta de despido como NO CONFORME. Y después, pide hora para un acto de conciliación, o pide ayuda a un abogado especializado para que lo haga en tu nombre. En este trámite se intenta llegar a un consenso con la empresa, de manera que ambas partes queden satisfechas. Aunque esto, en muchas ocasiones, no es posible.
Plazo para la demanda
En caso de que en el acto de conciliación no se alcance un acuerdo, te recomendamos que tu abogado interponga una demanda judicial. El plazo para presentarla es de 20 días hábiles desde que se notificó el despido.
¿Y si las causas del despido disciplinario son ciertas?
Conclusión
Si en realidad sabes que has cometido una o varias faltas graves en el trabajo y, por tanto, tu despido disciplinario no es falso, o es tu abogado quien te corrobora que son correctos los motivos de tu despido disciplinario, intenta mirar tu situación desde otra perspectiva. Aprovecha tu situación legal de desempleo para buscar un trabajo que se adapte mejor a ti. Además, recuerda que el despido disciplinario tiene paro, y podrías cobrarlo si cumples los requisitos para ello. Este cambio en tu vida puede llegar por sorpresa, porque el despido disciplinario no tiene preaviso, pero cuando estés listo puedes comenzar una nueva etapa hacia nuevas metas laborales.
¿Me pueden echar del trabajo por una falta grave?
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