Cómo calcular tu finiquito por jubilación. Ejemplos
Abandonar la empresa para jubilarse no equivale a un despido, sino a una renuncia voluntaria. En términos económicos, esto significa que el trabajador no cobrará una indemnización, como podría ocurrir en caso de despido, sino solo una liquidación o finiquito.
Por tanto, cuando te jubilas tienes derecho a finiquito. No obstante, algunos convenios colectivos sí establecen que, además de dicha liquidación, la persona perciba una indemnización por jubilación (sobre todo si esta es anticipada). Sin embargo, esa no es la norma general.
Pero, ¿qué se debe pagar en un finiquito por jubilación? Los conceptos que se incluyen en el finiquito responden a cantidades generadas por el ejercicio del trabajo pero que no se han cobrado en la fecha en que se extingue el contrato. Son importes que el empresario debe al empleado, y que le debe abonar con motivo de su cese. En realidad, se percibe lo mismo que si se tratara de una renuncia para dejar la empresa por cualquier otra razón.
Índice de contenidos
Finiquito por jubilación total
Cuando una persona se jubila, mediante la jubilación ordinaria o anticipada, tiene derecho a finiquito. De esta forma, quedan saldadas sus cuentas con el empleador que hasta ese momento le ha tenido contratado. Y el procedimiento correcto no se reduce al pago, sino que la empresa debe entregar al futuro jubilado un documento de saldo y finiquito. En él, han de quedar reflejadas -y desglosadas- las cuantías incluidas.
Pese a esta norma, puede caber la posibilidad de que la cifra resultante sea 0 (y que, incluso, sea negativa, aunque este último supuesto no es frecuente). Un ejemplo de finiquito por jubilación donde no se cobraría nada sería si se abandona el puesto el último día de mes -y la nómina se ha ingresado-, se han consumido los periodos de vacaciones correspondientes, y además no hay horas extras ni pagas extraordinarias pendientes de cobro. Porque estos cuatro elementos son los que configuran la base de un finiquito, como se expone a continuación, pese a que puede haber otros más específicos.
Cómo se calcula el finiquito por jubilación y ejemplos
La fórmula de calcular un finiquito por jubilación es idéntica a la de cualquier otro finiquito, debido a que no existen diferentes clases de liquidación o finiquito. La ley solamente recoge una, que tiene diversos factores: los últimos días trabajados, las vacaciones no disfrutadas, las horas extras no percibidas, la parte de pagas extras que se haya acumulado (de no estar prorrateadas), y otros componentes como bonus, incentivos o comisiones que se puedan adeudar.
La suma de cada uno de todos estos conceptos, o de los que pertenezcan en cada caso, es lo que se debe pagar en un finiquito por jubilación. Seguidamente, se analizan por separado.
El salario
Si a un trabajador le finiquitan, por ejemplo, el día 20 del mes en curso al acabar su jornada, el finiquito incluirá esos 20 días trabajados tras la última nómina (del anterior mes completo ya retribuido). Esta es una de las partes que conforman un finiquito: los días trabajados durante el último mes, que si no se ha finalizado no habrá dado lugar aún a una nómina. En conclusión, cuando te jubilas tienes derecho a finiquito y este debe englobar hasta el último día de actividad laboral.
Concretamente, para hallar esta cifra, se debe tomar como referencia el salario del mes anterior y dividirlo entre 30. Después, el resultado se multiplica por el número total de días trabajados a lo largo del último mes -20 en el ejemplo planteado-, y así se obtiene el importe exacto. Suponiendo que el sueldo es de 1.800 € mensuales, 1.800 entre 30 son 60 € de salario diario. Y 60 por 20 días da 1.200 €, que es lo que le ingresaría la empresa al futuro jubilado como último salario.
Las pagas extra
En la actualidad, es común que las empresas dividan las pagas extras mes a mes, es decir, que las prorrateen. Pero si no es así, y se abonan íntegras en distintos momentos del año, las fracciones pendientes de cobrar deben estar comprendidas en el finiquito.
Por ejemplo: un empleado se va a jubilar y por ese motivo su contrato se extinguió el 31 de octubre, teniendo dos pagas extra por contrato y habiendo recibido la de verano en julio. En este escenario, habría que calcular los días transcurridos desde el 1 de julio hasta la fecha del cese (en este caso, esos cuatro meses suponen 122 días).
Como siguiente paso, y para averiguar cuánto le corresponde de la paga de Navidad en el finiquito:
- Se divide entre 182,5 (días) -es decir, seis meses- el valor de dicha paga, que es el periodo de tiempo que cubre, al tener el contrato dos pagas extras anuales. Si estas, por ejemplo, ascienden a 1.800 € cada una, como en el ejemplo de salario del apartado anterior, el resultado de la operación sería de 9,86 € al día [1.800 ÷ 182,5 = 9,86].
- Ahora, la cifra de 122 (días) anteriormente calculada, que equivale al tiempo trabajado desde la fecha que se tiene en cuenta por ley para la paga extra de verano -1 de julio-, se multiplica por el importe diario de 9,86 €, y la cantidad final sería lo que aparecerá en el finiquito como pagas extra devengadas pero no cobradas. Siguiendo el ejemplo: 122 x 9,86 = 1.202,92 €.
Vacaciones no disfrutadas
Si en la fecha de emisión del finiquito el trabajador no ha agotado las vacaciones que ha generado hasta ese día, las no disfrutadas se transformarán en dinero a liquidar. La base de la que hay que partir es de 30 días de vacaciones por cada 360 días.
Si el empleado trabajó hasta el 31 de octubre inclusive, volviendo al ejemplo utilizado en el cálculo de las pagas extra, habrá estado contratado ese año -desde el 1 de enero- un total de 10 meses (304 días). Por tanto, si cada 360 días, 30 son de vacaciones, por 304 días, habría tenido derecho a 25,33 días de vacaciones anuales, una vez aplicada una ‘regla de tres’.
Como paso siguiente, hay que saber cuántos días de vacaciones no ha gastado. Si, por ejemplo, fueran 10, le quedarían 15,33 a percibir en el finiquito [25,33 - 10 = 15,33]. Y este dato se ha de multiplicar por el sueldo diario (60 €, retomando la cuantía del apartado de cálculo de salario). En definitiva, en este ejemplo de finiquito por jubilación, a esta persona le pertenecerían: 15,33 x 60 = 919,80 € en concepto de vacaciones no disfrutadas.
Horas extra y otras partidas salariales
Si en la fecha de entrega del finiquito el empresario aún no ha remunerado todas las horas extras que ha realizado el trabajador, las pendientes se deben incluir en la liquidación.
Y lo mismo sucede si al empleado se le adeuda algún tipo de bonus, incentivo, comisión, dieta, gratificación, etc. También es necesario que se incluyan en el finiquito. De existir, deben sumarse a las operaciones antes señaladas para calcular el finiquito por jubilación.
Finiquito en caso de jubilación anticipada
¿Cuando te jubilas tienes derecho a un finiquito diferente si se trata de un retiro anticipado? La respuesta a esta pregunta es negativa: el finiquito por jubilación anticipada no difiere en nada del cálculo estándar. Por tanto, el ejemplo de finiquito por jubilación que se ha plasmado en párrafos anteriores también serviría si la jubilación, en lugar de ser ordinaria, es anticipada.
En cuanto a la indemnización por jubilación anticipada, en la normativa general del Derecho Laboral no se contempla. Pese a ello, hay empresas que, por convenio colectivo, pueden incentivar este adelanto de la fecha de jubilación con una indemnización especial.
¿Qué se debe pagar en un finiquito por jubilación? Conclusión
Un empleado que se va a jubilar debe cobrar todo lo que haya devengado y no se le haya abonado hasta este momento. No es un premio, es lo que legalmente merece percibir el trabajador por su labor. Un devengo es, por definición, una deuda que no se ha saldado y que deriva de un trabajo o servicio determinado.
No obstante, es importante recordar que el finiquito está afectado por deducciones, como la retención de IRPF y las cotizaciones a la Seguridad Social. Por lo tanto, hay que tener en cuenta que el resultado final del cálculo, según las indicaciones que han descrito en este análisis y en los ejemplos de finiquito por jubilación, siempre será un importe bruto. En la cuenta bancaria o mediante cheque, el futuro jubilado solo verá reflejado el neto (una vez aplicadas las debidas deducciones).